El nuevo libro del cántabro afincado en Castellón, Luis Rodríguez, plantea el enigma común de la materia y la conciencia sin poder hacer otra cosa que sumar su desconcierto al desconcierto primordial del mundo.
Rodríguez habla de su pericia desde el punto de vista de la derrota subjetiva y personal por no saber levantar un «yo» pleno y significativo, pero teniendo en cuenta de la imposibilidad de que exista un mundo estable y duradero sobre el que se pueda actuar.
Un libro extraño y de difícil resumen de Luis Rodríguez (Cossío, 1958), que reside en la localidad castellonense de Benicàssim y que publicó ‘La soledad del cometa’ en KRK Ediciones, en 2009, la misma editorial que ahora ha lanzado esta nueva obra.