El hispanista Ian Gibson viajó a la Casona de Tudanca para hablar de Federico García Lorca y su llanto por el torero Ignacio Sánchez Mejías, dentro de las actividades de verano que organiza la Universidad de Cantabria (UC).
Coordinado por el profesor Mario Crespo, el encuentro se celebró en la casa museo del insigne académico y amante de los toros y de la poesía, José María de Cossío, donde se encuentra la más valiosa colección de manuscritos de poetas españoles del siglo XX. El encuentro de Tudanca, que celebró su tercera edición, consistió en una mesa redonda dirigida por el catedrático de Derecho Administrativo de la UC, Juan Manuel Alegre Ávila y en la que también participaron la catedrática de Lengua Española de la UC, Lourdes Royano y el propio coordinador de la actividad, Mario Crespo.
Gibson dejó claro la enorme influencia que tuvo la muerte del torero Sánchez Mejías en García Lorca. El torero era amigo e integrante por su afición a la literatura de la Generación del 27 que tanto cohesionó José María de Cossío, entre otras cosas por proponer la temática de los toros en los versos de aquellos jóvenes poetas. Gibson incluso llegó a decir que la muerte del torero en el ruedo, expresada posteriormente en su famoso llanto, fue una especie de premonición sobre la trágica muerte del poeta.
Por su parte, Lourdes Royano destacó la relación de amistad entre Lorca y el torero para comprender la profundidad y emoción del poema, añadiendo que además, el llanto de Lorca también es una representación del cariño popular que los andaluces tenían por Sánchez Mejías.
El manuscrito del ‘Llano por Ignacio Sánchez Mejías’ se encuentra en la Casona de Tudanca y en el encuentro también se evocó la amistad de Cossío con el poeta granadino y con todos los miembros del 27.